Lo más importante para evitar que las enfermedades cardiovasculares sigan siendo la primera causa de muerte y de incapacidad, es su detección y tratamiento precoces.
Todos los años, las enfermedades cardiovasculares encabezan las listas de los problemas de salud más graves del país. El sistema cardiovascular está formado por el corazón y los vasos sanguíneos. Algunas de incluyen las siguientes: Enfermedad cardiaca coronaria (enfermedad de las arterias coronarias, enfermedad cardiaca isquémica), Embolia (derrame o apoplejía cerebral), Presión alta de la sangre (hipertensión) y Enfermedad cardiaca reumática.
La enfermedad coronaria es la primera causa de muerte, y la embolia la tercera. aunque también es la primera entre las enfermedades que causan incapacidad grave y a largo plazo. Sin embargo, los estudios demuestran que casi todas las personas pueden tener un corazón sano si siguen una dieta adecuada, un programa de ejercicios apropiado, un plan de cuidados para su salud de rutina y eliminan los productos derivados del tabaco.
Cómo prevenirlas
Es posible reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular - mediante la eliminación de los factores de riesgo que se pueden controlar y el cuidado de los factores de riesgo que no se pueden controlar.
Un estilo de
vida más saludable puede ayudar a prevenir las cardiopatías (enfermedades del corazón). Esto incluye lo siguiente adoptar una dieta saludable que incluya cantidades adecuadas de calorías, colesterol, grasas, fibra y sodio. De igual forma, un programa de ejercicios diarios no esta nada mal, elija una actividad que le guste y hable con su médico sobre un plan de ejercicio que se adapte a sus necesidades y a su capacidad individual.
Un programa de ejercicios le ayudará a controlar casi todos los factores de riesgo para el ataque al corazón y la embolia cerebral.
Esto ayudará a controlar los factores de riesgo para el ataque al corazón y la embolia cerebral. Así como prevenir o controlar otras enfermedades crónicas como adelgazar y a aumentar su nivel de energía, sobre todo mejorar su estado general de salud.
La ¨bendita hipertensión¨
La hipertensión aumenta los riesgos de embolias o "stroke", ataques cardíacos, arterioesclerosis y otros problemas de salud. El mayor trabajo que realizan el corazón y las arterias durante un tiempo prolongado hace crecer al corazón y apresura el endurecimiento arterial.
Los órganos dejan de recibir suficiente oxígeno y nutrientes a través de las arterias estrechas y endurecidas, y aparece la posibilidad de que un coágulo impida el abastecimiento de sangre a partes del cuerpo.
Normalmente el corazón late de 60 a 80 veces por minuto, y la presión sanguínea sube con cada latido, o baja entre los latidos, cuando se produce el descanso del corazón, aunque también varía con los cambios de posición o de actividad.
La cifra más alta de la presión indica el nivel sistólico, cuando el corazón late, y la más baja representa el nivel diastólico, cuando descansa. No hay una cifra determinada para la presión normal , pero siempre debe ser inferior a 140 / 90. Una presión de 138 a 139 sobre 88-89 debe ser controlada. Es el chequeo de esos niveles el único procedimiento para definir si hay padecimiento de hipertensión, y el médico debe controlarla durante cierto tiempo antes de establecer conclusiones.
La persona hipertensa puede ayudar al control de su presión sanguínea si mantiene un peso adecuado, evita alimentos salados, no fuma o consume regularmente alcohol, toma el medicamento de acuerdo con las indicaciones de su médico sin dejar de hacerlo sistemáticamente, y sigue los consejos del especialista en cuanto al ejercicio físico.
